Ya sé que esto no es un blog de recetas, pero mi suegra me ha traído vino y peras de Portugal y me han salido buenísimas, supongo que porque es muy fácil… En cualquier caso, el nombre de la receta lleva la palabra vino, así que aceptamos pulpo como animal de compañía.
Tengo vino Pêra Doce Reserva 2009 y Peras Rocha, ambos ingredientes son los más adecuados para cocinar este postre, aunque lo podréis preparar con cualquier vino tinto de andar por casa y peras Conferencia (cuanto más pequeñas mejor).
El vino – Pêra Doce Reserva 2009 – a pesar de su nombre, no se vende como vino para cocina o repostería; según la bodega es perfecto para acompañar carnes rojas, caza y quesos curados. Personalmente me pareció excesivamente tánico, muy astringente. La variedad de las peras se llama Pêra Rocha (Pera Roca), autóctona de Portugal y de temporada se puede encontrar en los mercados del país luso en la estación de otoño. Lo más parecido que tenemos aquí, es la Conferencia.
Bueno, vamos allá.
Ingredientes y cantidades
- 1 Botella de vino tinto (se usa medio litro, 2/3 de botella)
- 1/2 litro de agua
- 6 Peras (Conferencia pequeñas)
- 125 gr. de azúcar
- 1 estrella de anís
- Canela en rama
- 1/2 cáscara de limón
Preparación
1. Se pelan las peras, dejamos el rabito.
2. En una olla ponemos a hervir 10 minutos el vino con el agua, el azúcar, el anís, la canela y la cáscara de limón. Removemos bien para que se diluya el azúcar y no se queme en el fondo. Si hemos tapado la olla, mejor quitar la tapa cuando rompa el hervor, así se va evaporando el alcohol.
3. Echar las peras en el caldo y dejar hervir hasta que estén blandas. Pinchamos con un palillo para comprobarlo. Si echáis algo más de azúcar y dejáis hervir más tiempo, el caldo quedará más denso, ya según vuestro gusto…
4. Se deja enfriar a temperatura ambiente en la misma olla y listas para zampar!
Pues aquí tenemos un postre resultón, y más fácil ¡imposible!
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